Imagina que estás en medio de una cita o has quedado a cenar con unas amigas, o tienes una reunión en el trabajo… alguien dice una broma, tú te ríes a carcajadas y de repente ahí está, unas gotas de pis nada deseadas en el momento menos apropiado.
La Incontinencia urinaria es común, está muy extendida, pero recuerda: eso no significa que sea normal, es un signo de que algo no va bien. Y te adelanto que la incontinencia puede tener serias repercusiones en la calidad de vida, incluyendo la disminución de la autoestima.
¿Pero por qué tengo ahora pérdidas de orina? Te explico 4 razones por la que puedes haber desarrollado pérdidas de orina de esfuerzo.
- Debilidad de suelo pélvico. El suelo pélvico sirve de soporte a los órganos pélvicos y además forma los esfínteres. Si no tiene el suficiente tono, un aumento de presión extra en el abdomen, va a provocar que no soporte el peso y se produzca el escape.
- Tu sistema de presiones no está funcionando correctamente. Puede que tu suelo pélvico esté perfectamente de manera localizada, pero aún así no está funcionando. El suelo pélvico tiene que trabajar en coordinación con otros músculos dentro del CORE profundo. Si esto no ocurre, cuando aumente la presión en tu abdomen, tu suelo pélvico no estará listo para frenar la pérdida de orina.
- Distensión en los sistemas de soporte. Los embarazos, partos, los cambios hormonales, la menopausia, la práctica de deportes de impacto o simplemente el envejecimiento de los tejidos puede provocar que los sistemas de soporte se distiendan, provocando que no funcionen de manera óptima.
- Prolapso de órganos pélvicos. Un prolapso es un descenso de uno o varios órganos pélvicos. Este descenso dificulta la acción de los esfínteres, siendo la incontinencia urinaria una consecuencia muy común en estos casos.
